Estudiantes
de V año de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá, disertaron
sobre Sexualidad Responsable ante
monitores del Programa de Convivencia Pacífica (PCP), quienes trabajan orientando a niños y jóvenes de San
Joaquín, Calidonia, Cerro Cocobolo, El Martillo, Nueva Libia, Rio Abajo,
Samaria, Curundú, Alcalde Díaz, Viejo Veranillo, Sinaí y Brooklincito.
El PCP es impulsado por la Universidad
de Panamá desde el año 2009. En conjunto con la Policía Nacional, aporta
esfuerzos dirigidos a mejorar la vida de los panameños. De manera ocasional, intermitente o coyuntural, colaboran con dicho
programa organizaciones, instituciones, empresas y personalidades que se
dedican al desarrollo de diversas
actividades, o que se desenvuelven en distintos ámbitos de la vida nacional. El Seminario Taller se realizó el reciente 20 de enero, con el objetivo de optimizar el trabajo que llevan a cabo estos guías a través del PCP, procurando contribuir en la construcción de cultura de paz y calidad de vida.
La presentación estuvo a cargo de los estudiantes Margarita Ríos y Yozman Pineda (como conferencistas principales) aunado al apoyo de María G. Sanjur, Geamfran Espino, Mía Levy, Gisselle Morgan y Elsa Rueda, sus compañeros de estudios
En relación a este importante tema, los futuros galenos recomendaron hablar sin tabúes, con normalidad, mencionando a cada cosa y caso por su nombre (ejemplo: pene, vagina, homosexual, sexo, pubertad, eyaculación…).
Brindar ayuda de manera respetuosa e imparcial, sin inmiscuirse en creencias. Interactuar evitando caer en exclusiones o actitudes discriminativas. Trabajar guiándose por reglas y normas.
Observando
respeto, seriedad, comprensión ante las opiniones y preguntas de las otras
personas. Evitando asumir posturas descalificadoras y burlescas.
Conceder
estricta y total privacidad/confidencialidad, absteniéndose de
divulgar/comentar lo que niños y jóvenes, de uno u otro sexo, revelan o
consultan.
Crear
fórmulas o condiciones que despierten, en los beneficiarios, confianza y los
libere de cohibición, temor, pena (ejemplo: utilizar una caja donde depositar
preguntas/consultas anónimas). Además, procurar hacer mención de todos los cambios
y situaciones que tienen lugar en el camino hacia la madurez sexual (y acerca
de la normalidad de los /as/ mismos /as/),
por si -en los interesados- persistiesen las reservas de abordarlos /as/.
Ilustrar
respondiendo a las preguntas: ¿qué es? ¿por qué (me sucede)? ¿es normal (que…)?
¿qué debo hacer? ¿dónde acudir? ¿qué consecuencias tendría…? ¿qué función tiene
uno u otro miembro o sistema?
El
orientador debe evitar hacer preguntas indebidas o irrespetuosas. Escuchar para
ser escuchado.
El
equipo compartió con los monitores vasta información y conocimiento sobre la
Pubertad (cambios físicos, emocionales, mentales, sociales y espirituales que
tienen lugar en ésta) y acerca de la Imagen Corporal. También en torno a las Infecciones
de Transmisión Sexual, Concepción y Contracepción. Sobre el embarazo (formas en que se puede
quedar en ese estado (penetración, contacto “externo” pene-vagina). Embarazos
programados, accidentales /sorpresivos, no deseados/, planificados.
El
llamado a tomar en cuenta y meditar con seriedad, responsabilidad, madurez y
sensatez, en torno a la decisión/acción de traer niños (¡hijos!) al mundo.
Sopesar si se está preparado para sumir dicha responsabilidad/misión.
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